Vol. 62 (100), 2022 - ISSN L 0459-1283
159
lo que determina la praxis pedagógica. A un docente disciplinar no le interesa si
forma para la libertad o para la opresión, si forma para el orden o desorden, si forma
para el bien o para el mal, si forma para la paz o la guerra, para la teoría o la praxis.
• XXB: Otro asunto interesante, es que de acuerdo al estado docente, el pedagogo,
debe tener según Basán, una cierta autonomía, sin embargo el estado se transforma
en un controlador, y el pedagogo que no actúa, que no hace y que no actúa ni se
pronuncia, pues es un docente que se queda sin ejercer su rol activo como
pedagogo. El estado actual, dice muchas veces trabajar con la pedagogía crítica para
transformar a los estudiantes y la educación, pero al final no saben con qué se come
eso. La pedagogía crítica necesita del diálogo y del encuentro con el estudiante.
• XXC: A los maestros graduados de la Universidad Bolivariana les enseñan con la
pedagogía crítica y lo que están es todos confundidos porque no conocen de
pedagogía crítica. Lo que yo he visto en los programas es que la pedagogía crítica se
mezcla con las ideas de Chávez, Simón Bolívar y otros… y eso crea una confusión
muy grande en los maestros.
• XXA: Bueno, hablar de pedagogía crítica, ustedes lo saben, es muy difícil, porque
se cruza con la ideología y con la política y tiene que ver con la ideología de las
cúpulas de poder que no dejan de tener implicaciones políticas. Hablar pues, de
pedagogía crítica, es hablar de ideología política. La pedagogía crítica habla de
diferencias, de nuevos conocimientos y de choque de ideas. Con esta reforma
curricular, espero que nuestras reflexiones nos lleven a no aceptar lo que se nos
imponga desde arriba, a rechazar trabajar desde los contenidos y trabajar, sí, desde
los espacios de construcción de nuestro propio conocimiento. Incluso, que a nivel de
postgrado se incluya pedagogía crítica del discurso, como ya lo tiene el de
lingüística, el doctorado de educación y no sé literatura…
• XXB: El de acá está en creación, la línea, en Latinoamérica lo tiene Colombia y
Barcelona; Larrosa y Colomer, ya hablan de una pedagogía de la literatura…El
pedagogo, volviendo al tema, debe tener influencia social y por ende un proyecto de
país.
• XXC: ¿Es un agente de cambio?
• XXB: Sí, un agente de cambio, debe tener un proyecto de país, porque la educación
no puede ir desvinculada de lo que es un país. Cuando el pedagogo habla de
programas, eso tiene que reflejar un proyecto de país. En Educación, cuando a un
pedagogo se le pregunta ¿qué proyecto de país piensa usted?, debe tenerlo.
• XXA: Nosotros hemos tenido ministros como Rooseen, con visión empresarial,
Adam Chávez, ¿qué sabe Adán Chávez de Educación?, Héctor Navarro, ingeniero,
el mismo Aristóbulo, con todo y todo haberse graduado de profesor y ¿qué conocen
y saben de educación? Los pedagogos deben tener un proyecto de país desde su
visión de la educación. Los chilenos que fundaron el Pedagógico tenían un proyecto
de país y eran críticos duros de lo que sucedía en él. Nosotros como UPEL,
tenemos que tener un proyecto de país.
Instituto Venezolano de Investigaciones
Lingüísticas
y
Literarias “Andrés Bello”